Muchos consideran que construir una
edificación es sólo cuestión de elegir el terreno, escoger los materiales y la
empresa constructora que llevará a cabo todo el proyecto de obra. No obstante,
hay un punto importante que no podemos obviar previamente a construir una obra:
realizar un estudio de suelos.
El estudio de suelos es el factor que
nos permite conocer las características físicas y geológicas del suelo,
partiendo de la secuencia litológica, las capas que lo conforman y su espesor,
la profundidad del nivel de agua subterránea, la capacidad de resistencia del
suelo, o el hecho de que haya una roca. Así mismo, nos permite conocer qué tipo
de cimentación es más adecuado para cada tipo de obra que se va a construir, o
el establecimiento de las estructuras que va a ser capaz de soportar.
Así mismo, el Estudio de la mecánica
de suelos es un documento suscrito por un profesional que se encuentra
acreditado y capacitado para la mecánica de suelos que se encarga de determinar
si la resistencia del terreno sobre el que se levantan las edificaciones sirve
de base según el tipo de cimentación que se va a emplear. Es por ello, que resulta
imprescindible realizar un estudio de suelos para posteriormente evitar los
posibles problemas que puedan surgir durante el proceso de construcción o en un
futuro.
Un
poco de historia sobre la Torre de Pisa
Un gran ejemplo de lo indispensable
que puede llegar a ser hacer un estudio de suelos es la Torre de Pisa en
Italia. No se sabe muy bien quién fue el arquitecto que se encargó de la
construcción, no obstante se cree que fue Bonanno Pisano, quién en el siglo XII
comenzó las obras, concretamente en 1173.
El objetivo de la Torre de Pisa era
que ésta fuese vertical pero las cosas no surgieron según lo previsto. Tardaron
5 años en construir los 3 primeros pisos, y al llegar a la 4ª planta la Torre
ya se estaba inclinando.
¿Cuál es el motivo para que la Torre
de Pisa empezara a inclinarse?
El motivo era que el suelo dónde se
asienta la torre es muy poco estable, el subsuelo es pantanoso y está
conformado esencialmente por arena y arcillas, materiales no muy compactos que
tienden a moverse y deformarse.
A este problema se le suma que la
parte de la torre que se encuentra enterrada, esto es los cimientos, tienen tan
sólo 3 metros de profundidad, lo que supone muy poca fijación para tratarse de
una torre de ni más ni menos 55 metros de altura y casi 15 mil toneladas de
peso.
Estos dos factores hicieron que la
torre se alejase cada año más de la perpendicular y acercándose cada vez más al
suelo, hecho que podría provocar el derrumbe, por lo que no hubo más remedio que
parar la construcción y dejarla a medias por largo tiempo.
Geometría de la
torre. Wikipedia
Se
retomó la construcción de la Torre
En 1272, tras el paso de 100 años, las
obras se retomaron y se decidió completar los pisos que faltaban que eran 7 más
el campanario. Con el fin de intentar nivelarla, al nuevo arquitecto se le
ocurrió construir los pisos en vertical sobre la torre inclinada compensando
más de un lado que del otro.
Esta idea fue un desastre, ya que lo
que consiguió fue inclinar aún más la torre pero ahora para el sentido contrario,
el Sur, por lo que volvieron a dejar la torre sin terminar.
En el año 1350, dos siglos después de
empezar la obra, la torre se dio por terminada. Desde aquel entonces la Torre
se ha ido inclinando adquiriendo la forma de un plátano.
¿Qué
pasará con la Torre de Pisa?
Siempre se ha temido por el derrumbe
de la Torre de Pisa, incluso hasta hace poco las probabilidades de derrumbarse
eran muy altas; cada año se inclinaba más y más rápido. Debido al
desconocimiento para evitar el desastre, en 1990 se prohibió el acceso a los
visitantes, ya que podía ser muy peligroso.
Sin embargo, durante los últimos años
se consiguió algo increíble, y es que el gobierno italiano reunió un grupo de
expertos que consiguieron a través de un complejo sistema de consolidación y
nivelación del suelo mediante el uso de materiales como el plomo y el hormigón
armado que la Torre se asentase y empezase a enderezarse.
En la actualidad, la situación está
controlada y su inclinación es la que tenía 2 o 3 siglos atrás, por lo que,
según los expertos no hay riesgo de que ésta se derrumbe.
Vista interior
escaleras. Wikipedia
¿Será
posible en un futuro enderezarla del todo?
Actualmente posiblemente la tecnología
actual podría permitirlo, pero el hecho de convertir a una ciudad famosa a
nivel mundial y la atracción del turismo a acudir a Italia motivan a evitar ya
esta medida.